El camino de la reducción de las pensiones de lujo

Xiomara Rodríguez Hernández

Diputada Partido Restauración Nacional

 

La discusión nacional en los distintos foros y medios de comunicación sobre los elevados montos de las pensiones otorgadas mediante tres regímenes de pensiones especiales, llamadas “Pensiones de Lujo”, llegó a convertirse en indignación nacional.

 

Interpretando el sentir de la ciudadanía, sabíamos que se debía actuar rápido porque además, el país ya estaba en medio de la crisis fiscal y un desempleo como nunca visto y no era justo que mientras el pueblo estaba pasando hambre otros recibían jugosos ingresos financiado con los impuestos de todos los costarricenses.

 

Los “Pensionados de Lujo” se mantenían amparados a regímenes especiales que cobijan al Poder Judicial, el Magisterio Nacional y el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, cuyas erogaciones sociales por concepto de pensiones o jubilaciones no resultan sostenibles ni coherentes con la realidad socioeconómica del país.

 

Los topes máximos aprobados en el pasado, de hasta diez salarios base según la escala salarial del régimen al que pertenezcan continuaba siendo, en el 2019, insuficiente en relación con la obligatoria cobertura del Estado y la inequidad existente entre los distintos regímenes de pensiones.

 

Para reparar esta injusticia empezamos a estudiar el tema y nos reunirnos con diferentes expertos, luego de mucho estudio logramos al fin tener un Proyecto de Ley que titulamos: “Ley para Rediseñar y Redistribuir los Recursos de la Contribución Especial Solidaria.”

 

La propuesta buscó bajar en dos salarios base, es decir, pasar de 10 a 8 los montos exentos del pago de la contribución solidaria especial y, consecuentemente, aumentar no solo el número de contribuyentes sino los porcentajes en los montos más altos de pensiones o jubilaciones, de forma progresiva, los cuales superaban las pensiones máximas vigentes.

No fue fácil, el tema era muy complicado a tal punto que en un inicio muchos compañeros diputados y hasta la misma prensa no entendía y se confundían con los números. Al final logramos dar a entender el proyecto y el mismo fue apoyado por la totalidad de los diputados.

 

El resultado positivo que tuvo la iniciativa al convertirse en Ley, lanzó una señal más en el camino por alcanzar la equidad y la razonabilidad de las pensiones y jubilaciones en nuestro país, indistintamente de las cotizaciones pagadas, pues al final, en ninguno de los casos se justifican las sumas que superan los topes máximos de pensiones.

 

El proyecto además de reparar una injusticia, porque logramos reducir al máximo los dineros que recibían los pensionados de lujo, permitió financiar un mayor auxilio a las personas que menos tienen, porque los dineros que se ahorró el Estado, son ahora destinados para el otorgamiento de pensiones del régimen no contributivo de la Caja Costarricense del Seguro Social, mediante una reforma posterior aprobada en el presente año.

 

Ser la autora de este proyecto me llena de orgullo, porque es un gran aporte a la justicia social del país. Trabajo que no se hubiera logrado, sin el apoyo de mis compañeros de fracción, de los diputados de la Comisión de Sociales y, de todaslas fracciones representadas en el plenario, de mis compañeros de oficina y todos los expertos que me apoyaron.

 

El derecho social a recibir una pensión digna, en cualquiera de los regímenes existentes, nunca se podrá justificar en el abuso o el beneficio indebido derivado de un régimen desequilibrado e insostenible en el tiempo.

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